Necromantical Screams

 El Black metal Hipster llegó al escenario donde copiar a bandas de Indie y Post Rock ya no iba a funcionar y para distinguirse del resto de la multitud, Uada tuvo que recurrir a robar el look encapuchado de Batushka y la música del favorito del funderground Storm of Light's Bane mientras está arreglado en el estilo zumbante de Mgla y similares. Todo esto está salpicado con todos los tropos hipster posibles y el nuevo truco publicitario de "ser supuestos nazis", que es una forma inteligente de llevar el metal Hipster a las multitudes anti-SJW mientras se reproduce música que satisface sus gustos. La banda que se está formando en Portland, conocida como la meca hipster, ya debería generar dudas para aquellos que no han experimentado el dolor de escuchar un disco así.

La producción es increíblemente sedosa con guitarras de varias capas que tocan con una distorsión de ganancia bastante baja que castra cualquier veneno que algunos de los riffs más agresivos podrían haber tenido, pero hace un gran trabajo manteniendo el sentimiento Rock durante las partes Indie. Los tambores alternan entre clics molestos y tambores de rock estándar con algunos rellenos y variaciones interesantes. Las voces degeneran en lamentos estúpidos e idiotas que simplemente distraen la atención de todo lo que sucede. La escofina de Black Metal está muy bien utilizada y mantiene un poco de potencia, mientras que las voces más profundas están al borde del susurro y suenan patéticas. El bajo no hace mucho y se escucha durante las partes de clic, ya que tiene todos los graves. Si no fuera por la batería y algunas de las voces, todo este disco suena como una copia de Paramore.

Los arpegios tipo Inquisition permiten a la banda estirar sus canciones hasta extremos ridículos que no dominan. El álbum es demasiado largo para el contenido que se presenta aquí. Con poco menos de una hora, la banda no puede cautivar al oyente en un estado mental específico o forzar ningún tipo de reacción. Esta es música puramente sin vida que suena sin cesar. Las secuencias de arpegios repetidos cambian después de varios minutos y están allí principalmente para que la guitarra solista haga un solo en la parte superior o para que las voces hagan sus travesuras de payaso habituales de empujar tantos estilos vocales en una frase como sea posible. Cuando la banda no está tocando a través de estas progresiones de Pop Rock que le deben a Paramore, se vuelven adoradores de Dissection filtrados sin sentido. La adoración se filtra ya que ninguna de las influencias del metal extremo permanece en las composiciones, pero las secciones Rock Star armonizadas durante mucho tiempo plagaron el segundo álbum de Jon Nodeveidt. Donde Dissection siempre combinaría estos pasajes con Death y Black metal bien pensados, aquí se combinan con el zumbido Mgla básico para invocar nada más que aburrimiento. Estas melodías apenas evolucionan y se reproducen durante demasiadas repeticiones, forzándose en la mente del oyente, pero se olvidan cuando la banda decide finalmente saltar a la siguiente sección aleatoria de la canción. Donde las bandas de Modern Metalcore buscan impactar con ideas contrastantes que se enfrentan entre sí, Uada simplemente yuxtapone ideas aleatorias, ya que la banda no tiene idea de cómo presentar una nueva melodía que haga avanzar la canción.

En última instancia, esto es a lo que recurre este álbum, un montón de ideas juntas sin sentido hasta que se pegan y forman el estilo monótono que por alguna razón quieren emular. Hay algunas buenas ideas aquí y allá pero quedan ahogadas por la mediocridad de todo lo que les rodea y en arreglos que no buscan poner ningún valor real a ninguna de las melodías individuales. Uada es una banda del sabor del mes y es de esperar que se olvide pronto. La banda tendría más éxito utilizando estructuras pop con un puente extendido para su sección armonizada y solos y reduciendo la duración de la canción a menos de tres minutos antes de descartar Metal en su música para hacer un buen Rock simple.